skip to main |
skip to sidebar
MICROCUENTO
Fue un día de abril cuando comenzó. Las campanadas cesaron de sonar a mediodía y el tiempo dejó de latir por un instante, pero nadie se dió cuenta. Hasta entonces la vida se había distinguido por su ausencia, o eso podría haberse pensado. A partir de ese momento todo fue definitivo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario